Published online by Cambridge University Press: 21 October 2022
During the expansion of Tawantinsuyo, the Inca Empire sustained its hegemony by using multiple strategies, including moving specialized groups called mitimaes to their conquered territories. This study examines bioarchaeological evidence from the Camarones 9 (CAM-9) Inca period cemetery at the mouth of the Camarones Valley in northern Chile. The waters in this valley contain concentrations of arsenic that are 100 times above the norm (10 μg/L) for human ingestion, causing serious health consequences. We study the environmental health effects on this population, using atomic absorption spectrometry and hydride generation to investigate arsenic concentration in the bone tissues of 16 individuals sampled from this burial site. Three of four individuals presented arsenic levels in their bones that were beyond the standard 1 μg/g, with a median of 3.6 μg/g; in some, the levels were nine times higher than those currently recommended by the World Health Organization. Considering previous and current bioarchaeological evidence, especially the high arsenic levels found in these individuals, we postulate that the CAM-9 site population corresponds to mitimaes who settled on the Camarones coast. This study is relevant to all regions of the world that present ecotoxic loads.
Durante la expansión del Tawantinsuyo, el Imperio Inca mantuvo su hegemonía a través de múltiples estrategias, incluyendo el traslado de grupos especializados, llamados mitimaes, a sus territorios conquistados. Se discuten las evidencias bioarqueológicas provenientes del cementerio Camarones 9 (CAM-9), en la desembocadura del valle de Camarones, norte de Chile, asociado al periodo Inca. Las aguas de este valle presentan concentraciones de arsénico 100 veces por sobre la norma (10 μg/L), lo que genera consecuencias nocivas para la salud. Mediante espectrometría de absorción atómica con generación de hidruros, se estudiaron las concentraciones de arsénico presente en los tejidos óseos de16 individuos de CAM-9. Tres de cada cuatro individuos presentaron niveles de arsénico en sus huesos más allá de la norma de 1 μg/g, con una mediana de 3,6 μg/g, y algunos con concentraciones nueve veces mayor a lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. A la luz de los estudios bioarqueológicos previos y actuales, en particular por el alto nivel de arsénico presente en los individuos, se postula que la población inhumada en CAM-9 correspondería a mitimaes asentados en la costa de Camarones. Este estudio es relevante para otras regiones del mundo que presentan importantes cargas eco-tóxicas.